El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, cree que Nicolás Maduro «está manteniendo su compromiso» con el acuerdo de Barbados, tras la liberación de varios presos políticos venezolanos y estadounidenses.
Biden se pronunció desde el estado de Wisconsin durante una visita oficial. Desde el aeropuerto de Milwaukee, se pronunció por primera vez sobre el intercambio de presos que su administración hizo con el régimen de Maduro.
«Parece que Maduro, hasta el momento, está manteniendo su compromiso para unas elecciones libres, aunque aún no lo ha hecho. Tenemos un largo camino por recorrer, pero está bien hasta el momento», afirmó.
Tras una actividad en la Cámara de Comercio Negra de Wisconsin, Biden fue cuestionado nuevamente por la prensa. Sin embargo, el presidente pidió que le preguntaran sobre el tema «más tarde».
EEUU justifica acciones
Antony Blinken, el secretario de Estado de Biden, defendió la decisión de la Casa Blanca de liberar al empresario Alex Saab. «Vamos a hacer todo lo posible para sacar a nuestros conciudadanos de peligro», dijo, sobre la liberación de estadounidenses detenidos en Venezuela.
«Queremos asegurarnos de que nuestros compatriotas estadounidenses sean liberados. También nos centramos en los presos políticos en Venezuela y tratamos de garantizar su liberación. Entonces, lo que puedo decir en este momento es esto», dijo.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, reconoció que hay que tomar «decisiones difíciles». «Nada es más importante para el presidente Biden que la seguridad de los estadounidenses en el extranjero», dijo.
El objeto de canje
Vale recordar que el régimen de Venezuela había nombrado a Álex Saab Morán en abril de 2018 como su enviado especial para llevar a cabo misiones oficiales en Irán, con el fin de garantizar las entregas humanitarias a su país. Los suministros incluían alimentos y medicinas.
Sin embargo, en julio de 2019, Estados Unidos añadió a Saab en su lista de sancionados por presunta participación en transacciones o programas administrados por el régimen venezolano.
Un informe de la ONU detalló que, en su tercer viaje a Irán, Saab fue detenido el 12 de junio de 2020 por las autoridades de Cabo Verde, país donde había hecho escala. Finalmente, Estados Unidos solicitó su extradición con base en acusaciones de lavado de dinero.
La extradición se concretó en octubre de 2021, luego de que los tribunales de Cabo Verde desestimaran numerosos recursos contra su extradición, e ignoraran su estatuto de diplomático ad hoc, así como la decisión a su favor del Tribunal de la Comunidad de Estados de África Occidental, y las múltiples comunicaciones oficiales de Venezuela.
En su momento, para tratar de burlar la justicia de Estados Unidos, Álex Saab, el señalado socio de Nicolás Maduro, no ahorró esfuerzos y puso en marcha un plan criminal que implicó comprar a dos agentes de la poderosa DEA que les filtraron información clave sobre las pesquisas en su contra en ese país.
Se trata de los curtidos agentes Manny Recio y John Constanzo Jr., declarados como culpables por un jurado federal de Manhattan. A ambos se les halló culpables de filtrar información confidencial a abogados defensores como parte de una conspiración de sobornos que, según los fiscales, puso en peligro casos destacados y la vida de informantes del narcotráfico en el extranjero.
El agente John Constanzo Jr. recibió 74.000 dólares de su exjefe Manny Recio, quien, una vez salió de la DEA en 2018, movió sus influencias y experiencia para buscar clientes en círculos exclusivos de Miami y Florida. A Saab, en medio de esos turbios negocios, le prometieron resultados extraordinarios.
Constanzo se puso manos a la obra. En 2019, por ejemplo, filtró la fecha exacta en la que la Fiscalía presentaría la acusación contra Saab por supuestamentedesviar unos 350 millones de dólares entregados por Maduro. Se trataba de recursos de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), que buscaban aliviar la grave crisis humanitaria y de alimentación en Venezuela, pero que solo habrían terminado llenando los bolsillos de Saab y sus secuaces.
Recio y Constanzo Jr. responden por graves cargos de soborno y fraude electrónico. El fiscal los cuestionó fuertemente por su poca ética y porque pusieron en peligro la identidad de testigos protegidos de fuentes humanas que participaron en el operativo contra Saab, uno de los más grandes llevados a cabo en la última década.
Los agentes de la DEA, para evitar dejar rastro, usaron teléfonos desechables y eliminaron por completo sus archivos de comunicaciones.
En el caso apareció Jorge Luis Hernández Villazón, alias Boliche, un narcotraficante y exparamilitar colombiano que tuvo contactos con Carlos Castaño Gil y Salvatore Mancuso Gómez, jefes de las AUC.
Boliche se ha presentado como informante del FBI y de la DEA a cambio de protección. Fue él mismo quien hizo la grabación clave para desenmarañar la filtración en el caso Saab, recibiendo información secreta y clasificada.
(LNT/Caraota Digital/Semana/AP)