El gobierno de Joe Biden ha expresado su desacuerdo con las medidas impuestas por el gobernador de Texas, que busca detener y expulsar a migrantes que ingresen de forma irregular a Estados Unidos. Sin embargo, la Corte Suprema ha frenado temporalmente la entrada en vigencia de esta ley.
La ley SB 88-4 de Texas convierte en delito menor el ingreso irregular al estado desde una nación extranjera, con penas de hasta 20 años de prisión para los reincidentes. Además, permite la expulsión de personas sin un proceso legal previo y otorga a la policía local la facultad de arrestar a quienes sospechen de un ingreso irregular y expulsarlos a México.
El gobierno de Biden argumenta que esta ley es inconsistente con fallos previos de la Corte Suprema y ha presentado una solicitud de emergencia para bloquear su implementación. El juez conservador Samuel Alito ha bloqueado temporalmente la ley y ha dado hasta el 13 de marzo a los jueces del Supremo para determinar los siguientes pasos.
Los demandantes, encabezados por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) de Texas, advierten que esta ley podría conducir a la discriminación racial en el estado, especialmente contra los hispanos.
Cabe mencionar que esta no es la primera medida controvertida que toma Texas en relación a la inmigración. En julio de 2023, el gobernador Greg Abbott ordenó la instalación de alambre de púas en un tramo de la frontera con México, pero el Tribunal Supremo de EE. UU. falló a favor del gobierno federal y ordenó su retiro.
Además, en febrero de 2024 entró en vigor una ley que aumenta la sentencia mínima de 2 a 10 años de cárcel para los traficantes de inmigrantes. Estas medidas han sido impulsadas por el gobernador Abbott como parte de su estrategia para frenar el paso de migrantes.
El gobierno de Biden ha criticado estas acciones y ha expresado su preocupación por las consecuencias de estas políticas migratorias en los derechos humanos y la discriminación racial.
En resumen, el gobierno de Joe Biden no está de acuerdo con las medidas impuestas por el gobernador de Texas para detener y expulsar a migrantes. La Corte Suprema ha frenado temporalmente la entrada en vigencia de la ley y se espera una decisión final en los próximos días. Esta no es la primera vez que Texas toma medidas controvertidas en materia de inmigración, y el gobierno de Biden ha expresado su preocupación por los derechos humanos y la discriminación racial.
(LNT/El Diario)