La empresa Worldcoin se ha metido en un lío por andar escaneando el iris de miles de personas a cambio de unas monedas virtuales. Según ellos, lo hacen para crear una moneda mundial que sea justa y segura, y que nadie sepa quién es quién. Pero la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) no se lo ha creído y les ha dicho que paren ya de una vez.
La AEPD llevaba desde febrero investigando a esta empresa, que tiene su sede en Alemania pero que opera en varios países. Resulta que habían recibido cuatro denuncias de gente que se había dejado escanear el ojo y luego se había arrepentido, o que no les habían explicado bien lo que iban a hacer con sus datos, o que habían visto a menores de edad participando en el escaneo.
Así que la AEPD decidió actuar y el miércoles 6 de marzo les mandó una carta a los de Worldcoin diciéndoles que se acabó el chollo, que dejen de escanear ojos y que bloqueen todos los datos que ya han recogido. Si no lo hacen, se pueden enfrentar a multas de hasta 20 millones de euros, que no es moco de pavo.
La directora de la AEPD, Mar España, dio una rueda de prensa en Madrid para explicar la situación y dijo que era la primera vez que tomaban una medida tan drástica, pero que era necesaria para proteger los derechos de las personas. Según ella, los datos del iris son muy sensibles y pueden poner en riesgo la privacidad y la seguridad de los usuarios.
Worldcoin es una empresa impulsada por Sam Altman, un tipo que sabe mucho de inteligencia artificial y que dirige el sistema ChatGPT, que es capaz de generar textos como este. Pero parece que no sabe mucho de leyes ni de ética, porque se ha saltado el Reglamento General de Protección de Datos, que es el que manda en Europa.
¿Y qué pasa ahora con Worldcoin?
Pues que se han quedado con un palmo de narices, porque no pueden seguir con su proyecto de crear una moneda mundial basada en el escaneo del iris. Además, tampoco pueden usar los datos que ya han recogido, ni siquiera los de los que se prestaron voluntariamente. Y si siguen haciendo caso omiso a la AEPD, se pueden meter en un lío aún mayor.
Así que ya sabes, si te encuentras con alguien que te ofrece unas criptomonedas a cambio de escanear tu ojo, piénsatelo dos veces antes de aceptar. No vaya a ser que luego te arrepientas y te quedes sin ojo y sin moneda.
Con información de EFE