El hijo del presidente estadounidense Joe Biden, Hunter Biden, ha mantenido «amplios vínculos» con casi una docena de altos funcionarios del Gobierno, desde la época en que su padre era vicepresidente en la Administración de Barack Obama, informó Fox News este lunes.
Las revelaciones demuestran el alcance potencial de Hunter en la Casa Blanca, mientras se espera que el cercado hijo del presidente estadounidense comparezca por primera vez ante un tribunal el 26 de julio por dos presuntas infracciones fiscales menores y un delito grave de posesión de armas.
De acuerdo con el informe, la lista de funcionarios con los que Hunter estaba o sigue estando en contacto incluye al secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken; al asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan; al asesor principal de Biden, Michael Donilon; a un estrecho colaborador del secretario de Defensa, Lloyd Austin, y a varias personas más.
Hunter y Sullivan trabajaron juntos en la junta del Proyecto Truman de Seguridad Nacional, un «think tank» liberal de política exterior, durante aproximadamente dos años antes de que Sullivan se uniera a la campaña del presidente en 2020. Durante ese tiempo, Hunter también sirvió en la junta de la compañía energética ucraniana Burisma Holdings y el fondo de capital privado chino BHR Partners. La investigación federal sobre los negocios de Hunter en el extranjero, que aún está en curso, también se inició durante el mismo período de tiempo en 2018.
Fox News recordó que el exfuncionario de la Casa Blanca Mike McCormick acusó en su momento a Sullivan de ser un «conspirador» en el «esquema de sobornos» de la familia Biden en Ucrania.
El informe también cita un extenso intercambio de correos electrónicos entre Hunter, en el momento en que formaba parte de la junta directiva de Burisma, y el entonces subsecretario de Estado, Antony Blinken. Esa correspondencia muestra que los dos programaron al menos una reunión en el Departamento de Estado en julio de 2015.
La reunión se gestó dos meses después de que Hunter enviara un correo electrónico a Blinken en el que le preguntaba: «¿Tienes unos minutos la semana que viene para tomar un café? Sé que estás imposiblemente ocupado, pero me gustaría pedirte consejo sobre un par de cosas».
Asimismo, sus comunicaciones se remontan al menos a una década atrás, cuando Hunter se puso en contacto en junio de 2010 con la esposa de Blinken, Evan Ryan, que actualmente es secretaria del gabinete de la Casa Blanca, para pedirle su dirección de correo electrónico no gubernamental: «¿Puede darme el correo electrónico no gubernamental de Toni? Quería enviarle algo», decía el mensaje.
El actual consejero superior de Biden, Michael Donilon, es también mencionado en decenas de correos electrónicos con Hunter y otros miembros del círculo íntimo, coordinando reuniones de estrategia a lo largo de las campañas políticas del actual presidente estadounidense.
Según los correos electrónicos, poco después de que Biden dejara el cargo en 2017, Hunter, Donilon y otras personas de su círculo íntimo fueron invitados a una reunión en la casa de Biden en Wilmington, Delaware, donde recientemente se descubrieron documentos clasificados.
La reunión tuvo lugar el 7 de febrero de 2017, el mismo día en que se anunció que el exvicepresidente dirigiría el Penn Biden Center de la Universidad de Pensilvania, donde también se encontraron documentos clasificados.
Según correos electrónicos y registros de visitas de la residencia presidencial, el actual jefe de gabinete de la Casa Blanca, Jeff Zients, que dirigió la respuesta del Gobierno contra la pandemia de covid-19 entre principios de 2021 y abril de 2022, se reunió con Hunter en múltiples ocasiones en 2016, pocos meses antes de que Biden, vicepresidente en aquel momento, abandonara la Casa Blanca. Biden padre habría asistido a las dos primeras reuniones, que tuvieron lugar en el Observatorio Naval de Estados Unidos, donde se encuentra la residencia de la vicepresidencia.
El mes pasado, el presidente del Comité de Supervisión y Responsabilidad de la Cámara de Representantes de EE.UU., James Comer, declaró que el FBI está investigando al presidente Biden por estar involucrado en supuestos sobornos cuando estaba en la Vicepresidencia del país, así como a su hijo, Hunter.
De acuerdo con sus palabras, «los funcionarios del FBI confirmaron que el registro no clasificado generado por el FBI no ha sido refutado y actualmente se está utilizando en una investigación en curso». Comer se refería a las acusaciones que rodean a los Biden de haber recibido 5 millones de dólares cada uno de un alto ejecutivo de la compañía de gas ucraniana Burisma, de la que Hunter formaba parte de la junta directiva.
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