Con apenas 11 años de edad, el niño venezolano Meiker Montaño caminó junto a 10 de sus familiares durante tres meses además de pasar por la selva del Darién, cargando a cuestas su tanque de oxígeno para poder respirar. Solo le funciona la mitad del corazón. Según reseñó Univisión, toda la familia pudo llegar a Estados Unidos.
La travesía de Meiker incluyó siete países y el terrible viaje en el techo del tren conocido como «La Bestia» para poder llegar hasta El Paso, Texas.
A Meiker le funciona solo la mitad de su corazón y ha sido sometido a tres cirugías para aliviar su salud. Llegaron a Estados Unidos con la esperanza de que el menor consiga un nuevo corazón.
La familia relató para diferentes medios internacionales que atravesaron la selva en cinco días. Durante la ruta del Darién, encontraron otros migrantes que les ofrecieron ayuda.
Muchos lo ayudaron a cargar su tanque de oxígeno, incluso en algunos momentos se quedaron sin comida, pero lograron solventar el inconveniente.
LNT / Primicia