La Policía de Brasil investiga a una trama formada por decenas de pastores evangélicos que, presuntamente, estafó a unas 50.000 víctimas aprovechándose de sus creencias religiosas, a través de la operación denominada Falso Profeta.
De acuerdo a un comunicado de la Policía Civil de Brasilia, se han dictado órdenes de prisión preventiva y búsqueda contra los responsables, acusados de estafa, lavado de dinero y falsificación documental, entre otros delitos.
La operación incluye el bloqueo de bienes por un valor no revelado y la prohibición a los acusados de acceder a las redes sociales.
La organización criminal, compuesta por unas 200 personas, movió 156 millones de reales (unos 30 millones de dólares o 28 millones de euros) en los últimos cinco años a través de unas 40 empresas pantalla y más de 800 cuentas sospechosas.
De acuerdo a los datos, la organización, valiéndose de la fe, persuadían a sus víctimas para que invirtieran sus ahorros en operaciones financieras y proyectos humanitarios falsos con la promesa de jugosos retornos.
Muchas de las víctimas eran personas que atendían los cultos de los pastores evangélicos investigados, quienes les aseguraban que habían sido elegidas por Dios para recibir «bendiciones» en forma de sumas millonarias.
En diciembre pasado, la Policía detuvo a un influenciador de este grupo, después de haber utilizado un documento falso en una sucursal bancaria con el que afirmaba estar en posesión de un crédito de 17.000 millones de reales.
Fuente: La República