El secretario general de la ONU, António Guterres, fue el primero en dar este martes su discurso en la edición número 78 de la Asamblea general de las Naciones Unidas. Allí destacó la invasión rusa a Ucrania, la crisis climática y acusó a los miembros del G20 de la producción del 80% de las emisiones de carbono, tal como reseñó France24.
En su alocución igualmente recordó que es necesario “hacer frente” a las amenazas “inminentes” que plantean las nuevas tecnologías a los derechos humanos. “La inteligencia artificial generativa es muy prometedora, pero también puede elevarnos a cruzar el Rubicón y a un peligro mayor del que podemos controlar”, apuntó Guterres.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se pronunció centrado en un enérgico llamado a la organización intergubernamental para que haga frente a la invasión rusa de Ucrania. “Rusia cree que el mundo se cansará y le permitirá brutalizar a Ucrania sin consecuencias. Pero yo les pregunto lo siguiente: si abandonamos los principios fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas para apaciguar a un agresor, ¿puede algún Estado miembro sentirse seguro de que está protegido?”, señaló Biden citado por CNN.
El mandatario norteamericano se opondrá a quienes afirman que el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, debería renunciar a zonas de Ucrania como Crimea y el Donbás. “Si permitimos que Ucrania sea dividida, ¿está asegurada la independencia de cualquier nación?”, cuestionó Biden.
Precisamente a propósito de la invasión rusa de Ucrania, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, abogó por un mayor diálogo entre ambos países. “No subestimamos las dificultades para alcanzar la paz, pero ninguna solución será duradera si no se basa en el diálogo”, insistió Lula durante su discurso ante la Asamblea General. “Se invierte mucho en armas y muy poco en desarrollo”, afirmó.
Además aconsejó cómo actuar contra el cambio climático, mecanismo que implicaría “pensar en el mañana y hacer frente a las desigualdades históricas”. Así, habló de cómo los países más ricos contribuyen a la crisis climática. “El 10% más rico de la población mundial es responsable de casi la mitad de todo el carbono liberado a la atmósfera. Nosotros, los países en desarrollo, no queremos repetir este modelo”, argumentó.
Por otra parte, abordó la lucha para alcanzar los objetivos de desarrollo del milenio (ODS) en 2030 y dijo que “la reducción de las desigualdades” debe ser una tarea de los gobiernos integrando a los más pobres en sus planes de gobierno y pidiendo a los ricos que paguen impuestos. “En Brasil estamos comprometidos a aplicar los 17 ODS de forma integrada e indivisible”, espetó Lula.
“Señoras y señores, hoy vuelvo como presidente de Brasil y esto es gracias a la victoria de la democracia en mi país. La democracia garantizó que superáramos el odio, la desinformación y la opresión”, afincó y sumó: “Brasil ha vuelto (…). Nuestro país ha vuelto para aportar su contribución a los grandes desafíos del mundo”.
(LNT | Agencias)
