Este domingo, más de 13 millones de ecuatorianos participarán en unas elecciones marcadas por la violencia del crimen organizado. El asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio ha sido uno de los trágicos episodios. Además, el proceso electoral ha incluido el voto de presos sin sentencia y el voto en casa para personas mayores o con discapacidad. Los ciudadanos elegirán al sucesor del presidente Guillermo Lasso y a los nuevos miembros de la Asamblea Nacional.
En mayo pasado, Lasso disolvió la Asamblea, de mayoría opositora, y convocó a elecciones tras enfrentar una moción de censura por presunto peculado. Los ganadores completarán el período de Lasso (2021-2025), ya que él decidió no presentarse a la reelección.
Ocho candidatos participan en la contienda presidencial, entre ellos Luisa González, Otto Sonnenholzner, Jan Topic, Yaku Pérez, Xavier Hervas, Daniel Noboa, Bolívar Armijos y Christian Zurita. Zurita reemplaza a Villavicencio y sus votos se asignarán a él.
La inseguridad y la violencia son temas centrales en las campañas electorales debido al aumento del crimen organizado y el narcotráfico. Ecuador ha experimentado un aumento significativo en homicidios intencionales en los últimos años.
El país se ha convertido en un punto clave para las mafias del narcotráfico, que utilizan sus puertos para exportar cocaína producida en Colombia y Perú hacia Europa y Norteamérica.
El asesinato de Villavicencio, perpetrado por sicarios colombianos, ha puesto de manifiesto la grave situación de violencia. El candidato había recibido amenazas de muerte y se comprometió a combatir sin miramientos a las bandas criminales.
La violencia ha afectado a otros políticos, candidatos, alcaldes, jueces y fiscales en las ciudades costeras, donde el tráfico de drogas es más frecuente. Ecuador busca enfrentar este fenómeno y garantizar la seguridad en las elecciones.
Los ecuatorianos también votarán en dos plebiscitos sobre petróleo y minería en reservas naturales, uno a nivel nacional y otro solo para Quito, en medio de las elecciones generales y un estado de excepción por la inseguridad en las cárceles.
LNT/ Agencias